Abr 162013
Este sábado estuvo un día precioso para un paseo, y nos acercamos hasta el monasterio de Armenteira, en el Salnés, entre las rías de Pontevedra y Arosa. Hay una ruta de senderismo que transcurre junto al río del mismo nombre que el monasterio (o será al revés), que tras las abundantes lluvias estaba para ponerse las botas, en todos los sentidos.
Con la disculpa de probar la D5200 me llevé a las chicas de paseo.
La que más ha salido ganando fue Ada, que ha ‘heredado’ la vieja D70.
Aunque me dejé el trípode en casa no pude resistir la tentación de intentar hacer un par de fotos del agua con velocidad lenta, pero no tanto como para que no salieran demasiado trepidadas a pulso. Un buen motivo para volver y recorrerla con más calma…